Si bien es cierto que la fase de creación de una campaña de publicidad digital es relativamente corta, también lo es que hay margen para cometer errores en su configuración.
Una fallo al introducir algún elemento de segmentación, una puja demasiado alta o un presupuesto diario con un cero de más, puede llevar al traste todo lo diseñado, haciendo que malfuncione.
Si el fallo cierra la audiencia el perjuicio se limita a que la campaña no camina, no tiene repercusión ni gasto de la inversión prevista. Cuando ocurre lo contrario, el fallo se puede merendar todo el presupuesto en un fin de semana.
Así que es importante mirar la campaña a diario, revisar configuraciones y comprobar impacto en las estadísticas tanto desde el adserver como desde analytics de la landing page.
Lo normal es que no se detecten errores, pero esto no debe desanimar a la hora de la revisión diaria, con que se produzca una vez el daño puede ser tremendo, al fin y al cabo se está lanzando a correr un servicio que tiene un gasto diario, no podemos dejarlo solo.