La diferencia entre lo que se dice entender y lo que en realidad se entiende

Suele atribuírsele a un problema del emisor, pero en realidad no debería. Cuando alguien dice entender alguna cuestión pero en realidad no es así, es cuando se producen los problemas, los cuales habitualmente se achacan al que explica.

En entornos nuevos o desconocidos es casi imposible entender según qué cosas. Es normal y por otra parte lógico. Pero por algún tipo de pudor no solemos reconocerlo. Así que normalmente asentimos con los ojos muy abiertos cuando queremos decir que no pillanos ni papa.

Vale, esto es así, y en mayor o medida lo hacemos todos. Pero en determinadas circunstancias dar esa falsa impresión puede ser bastante perjudicial. Pero todavía lo es más quien dice entender algo que solo comprende en su literalidad.

Como el chiste infantil en el que el profesor pregunta ‘Si tengo dos manzanas y me dan otras dos ¿cuántas manzanas tengo? -Y el alumno responde: Yo es que me lo sabía con naranjas…’

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *