Hay cierta afición par parte de algunas personas de adquirir ciertos dispositivos que se encuentran por encima de las posibilidades mínimas que tienen como usuarios de los mismos.
En ocasiones, al comprarlos, lo que se busca es proyectar cierto estatus, o directamente no llegan a plantearse mucho al respecto. El otro día, en un servicio técnico al que tuve que ir, vi a una persona con tres dispositivos de gama alta desplegados, algo bastante llamativo.
Mientras esperaba escuché la operativa que quería llevar a cabo, algo que era tremendamente simple, pero que no alcanzaba a comprobar, solo sabía lo que quería y no quería que pasara.
El operador del servicio técnico con gran paciencia le estaba ayudando, mientras le hacía una serie de preguntas obvias pero necesarias, a las que no conseguía ningún tipo de respuesta, porque la usuaria no sabía de qué le estaba hablando.
Qué necesidad.